Miércoles y seguimos conduciendo por la ruta 1, una de las rutas escénicas más bonitas de EEUU. Lo que te llevaría 2 horas y media por la 101 por aquí se convierte en 4 horas pero ..., y a quien le importa. Este tramo es el más prometedor ya que durante todo el kilometraje vas bordeando la costa con el Parque Nacional Los Padres al otro lado de la carretera. Queremos llegar a Monterey para dormir allí y salir en barco mañana a avistar ballenas.
Para mí lo mejor es ir parando donde te de la gana y disfrutar del paisaje mientras conduces. Como sólo puedo ir conduciendo yo en este viaje si que necesito parar más para poder apreciar cada sitio.
A 7 millas de San Simeon dentro de lo que se llamaría Big Sur hay una colonia de elefantes marinos, la playa exactamente se llama Piedras Blancas y es muy fácil de encontrar.
El paisaje detrás a espaldas de Piedras Blancas.
Paramos a comer en el único sitio que hay en muchos kilómetros y nos sangran por dos hamburguesas.
Las vistas del Pacífico al menos son buenas desde aquí.
Seguimos, seguimos, seguimos ... venga kilómetros.
Y después del largo viaje disfrutando del pacífico aquí estamos en Monterey para ver atardecer desde la playa.
A medida que nos acercamos a San Francisco y vamos más hacia el norte se nota que todavía es invierno y la rasca incrementa.
Por la noche fuimos al muelle de pescadores para ver de donde tenemos que coger el barco para ir a avistar ballenas.
Y para repostar nos vamos a Monterey Fish House, un sitio bastante perdido y parece ser que no en muy buena zona pero que tiene un pescado y un marisco que alucinas.
Es bastante sencillo y está lleno de personas locales lo cual da muy buena sensación solo al entrar. Y esto es especialidad de la casa, un postre hecho de azúcar derretida y mantequilla que es preparado por el camarero a fuego abierto, pero que muy abierto, en tu mesa.
Te queman las cejas y te dan el postre por el mismo precio.
Y a dormir, que mañana hay que levantarse muy temprano para ver las ballenas.
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